jueves, 16 de junio de 2011

CARTA ABIERTA A LA NUEVA CORPORACIÓN DE LA DIPUTACIÓN

Una vez constituidos los Ayuntamientos, para completar el proceso ya sólo queda que se conforme la Corporación Provincial.
Por parte de UGT, queremos transmitir al futuro Gobierno, en primer lugar nuestra felicitación y en segundo, algunas reflexiones que no estarían mal que se tuvieran en cuenta para afrontar la gestión de los próximos años.
Estamos en un contexto de crisis económica, una realidad que por supuesto no obviamos, pero también es cierto, que esta crisis no está afectando a todos por igual, pues, mientras a unos les está suponiendo recortes en sus derechos económicos, sociales y laborales, como es el caso de los trabajadores y trabajadoras, a otros, les está reportando grandes beneficios, cuando seguramente la responsabilidad de la crisis tiene mucho que ver con ellos.
Esta situación se agrava cuando comprobamos la política que desde Recursos Humanos se sigue en los Centros Asistenciales y Educativos. Los trabajadores y trabajadoras de estos Centros, que atienden a personas cada vez con un mayor grado de dependencia, están sufriendo la negativa de la Diputación a cubrir las necesidades de personal, tal como está reflejado en los calendarios laborales, que están viendo como éstos se incumplen sistemáticamente, teniendo que recurrir en exceso al uso de horas extraordinarias, en perjuicio del personal de las bolsas de trabajo,  al tener que cubrir los turnos por estar los servicios bajo mínimos, influyendo negativamente en la calidad de los servicios.
También es un uso cada vez más frecuente en la Diputación el recurrir a la contratación de servicios con empresas privadas, en detrimento de los recursos propios,  muy evidente en el servicio de mantenimiento. Estamos comprobando que cada vez hay menos personas adscritas al citado servicio, el trabajo encomendado se va restringiendo y se va dejando cada día más obras  para la subcontratación en el exterior. Esto se llama privatizar el servicio público.
Por todo esto, apelamos a la sensibilidad social que debe inspirar a la mayoría socialista de la Corporación. Tiene que haber reciprocidad a la hora de asumir responsabilidades. Los empleados y empleadas hemos asumido la nuestra en la negociación colectiva. No es aceptable que por parte de los/as políticos/as de la Diputación no se vislumbre nítidamente la coherencia ética. Ya que mientras que los cargos y puestos de libre designación se cubren todos al 100% y para “sus vacantes” la cobertura es inmediata, no ocurre igual, como hemos reflejado anteriormente, cuando se trata de atender las necesidades de los Centros.
Desde UGT hacemos un llamamiento a la responsabilidad y volvemos a apelar a que la coherencia sea una práctica común de la nueva Corporación. No se pueden exigir sacrificios a los trabajadores y trabajadoras y a la vez no dar muestras de austeridad en el  comportamiento político.
Nadie está más interesado en que la Diputación sea útil y dé un buen servicio a la ciudadanía de la provincia de Sevilla que los propios trabajadores/as. Nuestro presente laboral está aquí y también queremos que esté nuestro futuro.