Tras
la parálisis en la gestión de los responsables políticos por el
periodo vacacional, en UGT intensificaremos la acción sindical para
responder contundentemente a la aplicación de los recortes que se
siguen produciendo en la Diputación por la vía de la Resolución de
Presidencia.
El
utilizar los periodos vacacionales para introducir recortes en las
condiciones de trabajo de los empleados/as son prácticas de
gobiernos poco serios y transparentes y muy alejados de posiciones
progresistas.
Con
"agosticidad", sin ningún tipo de negociación, se ha
impuesto la ampliación de la jornada laboral de 37,5 horas. Con el
agravante de establecer una bolsa de horas en los centros de trabajo
a turnos, de tal forma, que los trabajadores/as sólo conocen con
exactitud una parte de su jornada, quedando otra a la arbitrariedad
de la empresa, que podrá usar las bolsas con total discrecionalidad.
Además,
al Personal Laboral no solo se le quita la paga extraordinaria de
navidad, que es más alta que la del personal funcionario análogo,
sino que en los meses de agosto a diciembre se le baja el salario en
la cantidad que complete la catorceava (1/14) parte del salario
anual. Es decir, en una interpretación muy restrictiva del Decreto
de recortes, al personal laboral se le quita la 1/14 parte de su
retribución anual, que es más que la paga extra de navidad.
Nuevamente
de forma restrictiva se eliminan permisos, dificultando la
conciliación de la vida familiar y laboral.
Desde
UGT insistiremos en nuestra estrategia de negociación-presión para
recuperar derechos expropiados por la aplicación exagerada que la
Diputación hace de los recortes del Gobierno del PP.
Es
primordial que el Presidente tome cartas en el asunto para que se
pueda recuperar la confianza en la negociación. El Gobierno de la
Diputación no puede declarar en los medios de comunicación de la
necesidad de negociar con los representantes de los trabajadores/as,
al mismo tiempo que dicta resoluciones contra dichos trabajadores/as,
sin tener en cuenta a las Organizaciones Sindicales con las que ni
siquiera intenta dialogar. Pero, es que, además, no cumple con los
acuerdos firmados con anterioridad. Con qué garantía se sienta a
negociar la UGT si la otra parte no se responsabiliza en cumplir con
lo que firma.
Antes
de pretender cualquier diálogo, la confianza se debe recuperar
estableciendo la forma de abonar las cantidades contempladas en la
Valoración de Puestos de Trabajo, que están recogidas en el
Convenio Colectivo y Acuerdo de Funcionarios vigentes, dejar sin
efecto la bolsa de horas para el personal a turno y reconsiderar la
aplicación restrictiva que han hecho del "decretazo" de
Rajoy.
5
se septiembre de 2012